Los apaches sufrieron una gran reducción de su población debido a las enfermedades traídas por los colonizadores españoles e ingleses, así como a la conquista violenta de los europeos. Los apaches resistieron tanto al gobierno colonial como al de los Estados Unidos emergentes, luchando en lo que se conoció como las "guerras apaches". Si los españoles no hubieran llegado a América, la población indígena apache no habría disminuido tanto.