La ley TIC de Colombia de 2009 tuvo como objetivo actualizar el marco normativo del sector de las tecnologías de la información y las comunicaciones para prepararlo para los rápidos cambios tecnológicos. La ley introdujo principios como la habilitación general para que los proveedores operen, la neutralidad tecnológica, y fortaleció la intervención del estado y la protección a los usuarios. Además, buscó promover el acceso universal a las TIC para impulsar la inclusión social y la competitividad del país.