La obsolescencia programada es la planificación del fin de la vida útil de un producto para maximizar las ganancias de los fabricantes, originándose en propuestas de los años 30 y popularizándose en los 50. Este fenómeno estimula artificialmente la demanda y se manifiesta en diversos productos, priorizando el lucro sobre la sostenibilidad ambiental. Incluye modalidades como la obsolescencia por moda y la de medicamentos, donde las fechas de caducidad se reducen para aumentar beneficios.