El documento discute los desafíos tecnológicos en las escuelas. Señala que aunque las TIC (tecnologías de la información y la comunicación) están más presentes, no todos tienen acceso a ellas. Esto puede dar lugar a brechas digitales educativas, culturales y lingüísticas. También sugiere que las escuelas deben adoptar una nueva cultura de trabajo en red, flexibilidad curricular y organizativa, y una nueva relación entre la escuela, administración, familia y empresas.