La Web 1.0 era principalmente de solo lectura, donde los usuarios dependían completamente de lo que los creadores de sitios web publicaban. La Web 2.0 permitió una mayor interacción entre usuarios a través de blogs, wikis y otras herramientas. La Web 3.0 se centra en el análisis de datos en tiempo real para brindar experiencias personalizadas a los usuarios a través de la inteligencia artificial y otras tecnologías.