Felipe II gobernó España e imperio entre 1556 y 1598. Se enfocó en mantener el catolicismo y la hegemonía española en Europa a través de conflictos con Francia, los turcos y los Países Bajos. Internamente enfrentó rebeliones de moriscos y protestantes. Anexó Portugal pero fracasó en invadir Inglaterra con la Armada Invencible. Su reinado marcó el apogeo pero también el inicio del declive del imperio español.