La agitación mecánica de líquidos se utiliza para mezclar, disolver, mejorar la transferencia de calor y dispersar gases y partículas en un líquido. Los equipos de agitación consisten en tanques cilíndricos y agitadores que pueden ser de paletas, turbinas o hélices, cada uno con características específicas para diferentes aplicaciones. La eficiencia del mezclado se ve afectada por factores como la geometría del tanque, la viscosidad del fluido y el tipo de agitador utilizado.