Este documento describe la política energética de España con respecto a las energías renovables. Explica que inicialmente la política promovió en exceso las energías renovables, lo que resultó en primas demasiado altas y una capacidad instalada mucho mayor de lo planeado, generando un gran déficit en la tarifa eléctrica. La política luego se corrigió para limitar el crecimiento de las energías renovables y reducir las primas con el objetivo de eliminar el déficit tarifario para 2013.