El documento describe las fibras de colágeno y toxina botulínica, que se usan comúnmente en cosméticos para reducir las arrugas. El colágeno se aplica tópicamente o por inyección para tensar la piel, pero sus efectos no son permanentes y requieren aplicaciones continuas. La toxina botulínica paraliza temporalmente los músculos de la cara mediante inyecciones para prevenir las arrugas, pero también tiene efectos secundarios como debilidad muscular. A pesar de sus usos cosméticos, los productos no log