El documento explora el concepto de control interno y su relevancia para la auditoría, definiéndolo como un conjunto de procesos diseñados por la administración para mitigar riesgos que amenazan el logro de los objetivos organizacionales. Se destacan principios como el autocontrol, autorregulación y autogestión, así como elementos cruciales como el ambiente de control y la gestión de riesgos. Además, se subraya la importancia del control interno en la mejora de la eficacia operativa, la fiabilidad de la información financiera y el cumplimiento normativo.