La piratería de software es un problema grave en América Latina, donde el 66% de todo el software instalado es ilegal, lo que representa pérdidas anuales de US$1,272 millones. Esto ocurre porque es fácil conseguir copias piratas y hay poca aplicación de las leyes de propiedad intelectual. Usar software pirata también plantea riesgos como virus y falta de actualizaciones. Los países deben combatir la piratería con leyes más estrictas, campañas de concientización y fomentando alternativas de software libre.