El método científico consiste en varias etapas: la observación de un fenómeno, la formulación de una hipótesis para explicarlo, la realización de experimentos para probar la hipótesis, y el análisis de los resultados para emitir conclusiones. Si la hipótesis es confirmada, se establece una teoría, y si esta teoría predice con éxito múltiples observaciones a lo largo del tiempo, puede convertirse en una ley científica.