El estudio StopDAPT-3 evaluó una estrategia antitrombótica sin aspirina para la prevención de eventos isquémicos tras la intervención coronaria percutánea (ICP) en pacientes de alto riesgo. Los resultados mostraron que la estrategia libre de aspirina no redujo la incidencia de hemorragias graves en el primer mes y se asoció con un aumento de eventos coronarios. Por tanto, la terapia dual con aspirina e inhibidores de P2Y12 seguirá siendo la norma durante al menos un mes post-ICP.