Las sedes electrónicas son puntos de acceso electrónico para que los ciudadanos puedan acceder a los servicios de la administración que requieran identificación o autenticación. Deben proporcionar información clara sobre sus servicios, garantizar la seguridad y privacidad de los datos, y cumplir con estándares de accesibilidad. Su contenido mínimo incluye información sobre la administración responsable, normas para el uso de la sede y enlaces a trámites y sugerencias.