Los tardígrados o osos de agua presentan cuatro tipos de criptobiosis que les permiten sobrevivir en condiciones extremas como la criobiosis, osmobiosis, anhidrobiosis y anoxibiosis. Pueden permanecer en estado latente durante 125 años y comparten características morfológicas con artrópodos, nematodos y onicóforos. Su color depende de su dieta.