El documento describe la evolución de la comunicación empresarial desde los años 1980 hasta la actualidad. En los años 1980, la comunicación se consideraba una herramienta subordinada a objetivos de negocio como el marketing o las relaciones públicas. En los años 1990, la comunicación pasó a ser una función estratégica junto a otras áreas como finanzas y recursos humanos. Hoy en día, la gestión de intangibles como la reputación y marca se ha vuelto crucial, ya que afectan la rentabilidad y el valor de una empresa más que sus activos materiales.