La Web 3.0 proporcionará conocimientos en lugar de datos a los usuarios, permitiéndoles obtener respuestas precisas a sus preguntas de manera rápida y sencilla. Dotará a la Web de mayor significado semántico mediante una infraestructura común que facilite compartir y procesar información. El objetivo es que la Web pueda inferir y realizar operaciones lógicas como la inteligencia artificial, proporcionando conocimientos en lugar de solo datos.